martes, 5 de agosto de 2008

Los fantasmas del Louvre


Alocados, estresados, endemoniados
prisioneros de la dimensión del tiempo
incitados sin cesar a verlo todo
sin observar nada
corren los fantasmas turbulentos del Louvre.

Sus muros sólo observan y se ríen.
Entre tanta rapidez y tanta falta de diálogo
su secreto está bien guardado
pues aun si lo gritaran al viento
nadie se detendría a escuchar.

2 comentarios:

Sarco Lange dijo...

PALABRAS SIN ANTESALA, FANTASMAS ESPEJIANOS QUE NOS DEVUELVEN UN ROSTRO MÁS DESPACIO (¿ALGUNA VEZ TE HAS PERCATADO DE UN ROSTRO MÁS DESPACIO?), EN EL LOUVRE ESTÁN, EN MI PIEZA TAMBIÉN LOS HAY, Y ASÍ LAS COSAS VA A SER URGENTE UN EXORCISMO.
EXELENCIA...

Anónimo dijo...

Bien expltado el hecho de la foto